El ocaso del general riobambeño Edgar Vaca

e vacaQuito (Pichincha). Edgar Vaca Vinueza, oriundo de Riobamba, nació el 4 de mayo de 1948. Es un hombre de estatura mediana, de tez blanca, manos gruesas. Robusto. Su mirada a ratos se encendía cuando hablaba acerca de casos de narcotráfico y sus amenazas. Lucía impaciente cuando conversaba con los periodistas. Fue uno de los oficiales más condecorados en la Policía Nacional. Un investigador de primer nivel que mereció el reconocimiento nacional e internacional, en especial de Estados Unidos, por sus labores de inteligencia en asuntos antinarcóticos y antiterroristas.

Era un ejemplo a seguir. Un libro de su autoría sobre Inteligencia era una especie de Biblia, de lectura básica, para los noveles oficiales que buscaban esa rama dentro de la Policía ecuatoriana.

Llegó al máximo puesto en su institución. Como General Inspector asumió el cargo de Comandante General de la Policía durante cinco meses en el Gobierno de Lucio Gutiérrez, desde el 17 de enero del 2003 al 16 de junio del 2003. Fue un hombre leal a Gutiérrez.

Su baja de las filas policiales fue firmada por el mismo Gutiérrez. Su trabajo le sirvió para obtener una de las más altas condecoraciones estatales y salir por la puerta grande. El Decreto Ejecutivo No. 1432, del uno de marzo del 2004, dice: “»Conferir la Condecoración ’Gran Cruz del Orden y Seguridad Nacional’ al general Inspector, Dr. Edgar Gonzalo Vaca Vinueza por haber ejercido las funciones de Comandante General de la Policía Nacional». Además, obtuvo la condecoración ’Misión Cumplida’ en la cual se agradecen los servicios prestados a la Nación.

Pero ahora esa misma institución que lo vio salir con honores, lo busca. No para obtener sus conocimientos, sino para apresarlo y llevarlo a prisión porque está imputado como autor de delitos de lesa humanidad. Es la caída del alto oficial.

Pese a su carrera de logros y reconocimientos, Edgar Vaca es uno de los expolicías más cuestionados del Ecuador por supuestos violaciones a los Derechos Humanos. Luego de más de una década de denuncias acerca de las torturas que posiblemente ejerció en contra de personas vinculadas con grupos rebeldes, como Alfaro Vive Carajo (AVC), con la Comisión de la Verdad se abrió -finalmente- una investigación donde Vaca ha sido señalado como uno de los principales agresores de los grupos rebeldes.

La Comisión investigó los posibles delitos cometidos entre 1983 y el 2008, en especial los cometidos por agentes del Estado y sus faltas graves a los Derechos Humanos como tortura, detención ilegal, atentado a la vida y ejecución extrajudicial. La Comisión, pese a las críticas como las realizadas por la misma defensa de Edgar Vaca, ha dicho que su investigación fue independiente.

Esos comisionados recibieron 600 testimonios de agresiones, 281 000 folios de documentos desclasificados. Hubo convocatorias públicas a 294 uniformados y autoridades civiles con presunta responsabilidad, se realizó la identificación física de los lugares donde se realizaron las detenciones ilegales y donde se produjeron torturas. El informe final tiene más de 2400 páginas y los relatos pormenorizados de cada caso. 311 víctimas fueron identificadas y, según la Comisión, 12 asesinatos premeditados por agentes del Estado.

Edgar Vaca fue involucrado en varios de estos casos. Y el uno de octubre pasado se realizó la audiencia de formulación de cargos por la detención ilegal, violencia sexual y torturas en contra de Susana Cajas, Luis Alberto Vaca y Javier Jarrín Sánchez. El fiscal general, Galo Chiriboga, fue implacable en contra de Vaca y otros 9 oficiales de las Fuerzas Armadas. El exoficial fue el único miembro de la Policía involucrado.

Chiriboga contó el caso frente a la jueza nacional Lucy Blacio y los defensores de los acusados. Todo respaldado en la investigación de la Comisión de la Verdad. El 10 de noviembre de 1985 los tres miembros de AVC fueron detenidos en Esmeraldas cerca de las ocho de la noche. Lo hicieron, dijo el Fiscal, agentes de Inteligencia Militar sin orden judicial. Al día siguiente, en la madrugada fueron llevados al Batallón de Inteligencia Militar en Conocoto, cerca de Quito. El parte de ese operativo, con seudónimos de los agentes, dice que estaba dirigido a ’ingeniero calvo’. Para la Fiscalía General el ’ingeniero calvo’ es Edgar Vaca.

El Fiscal General dijo, apoyado en el testimonio de Luis Vaca, que las celdas en ese recinto militar eran de dos metros por un metro, oscuras, malolientes y sin colchón. Estas cárceles, acotó la Fiscalía, fueron diseñadas bajo las pautas de un Manual, de 1983, de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos.

Susana Cajas y Luis Vaca contaron las torturas físicas y sicológicas que sufrieron durante dos semanas. «Golpes, patadas, aplicación de electricidad con especial morbo en los genitales, baños de agua helada, les sumergieron las cabezas en agua hasta que no puedan resistir. En el caso de Susana Cajas fue forzada a permanecer desnuda y le exigían que masturbe a los oficiales», dice el escrito de la Audiencia de Formulación de Cargos.

Pero además, para la Fiscalía, existe una desaparición forzosa temporal en el caso de Luis Vaca. Él no tuvo capacidad de defenderse y proteger sus derechos. Los familiares, contó Chiriboga en la Audiencia, lo buscaron sin saber el paradero, la Comisión Ecuménica de los Derechos Humanos denunció públicamente el caso, incluso por la prensa… pero tampoco hubo respuesta. Susana Cajas y Javier Jarrín fueron liberados luego de 15 días en una quebrada cercana a Cumbayá. Y, extrañamente, fueron recogidos por agentes del SIC.

Pero en el caso de Luis Vaca, el gobierno de León Febres Cordero negó su apresamiento. Él permaneció en una celda del recinto militar durante tres años, sin juicio. Chiriboga dijo que estuvo incomunicado, con un trato cruel, inhumano y degradante. Lo utilizaban para corroborar versiones de los miembros que eran detenidos de AVC. Incluso Vaca intentó suicidarse en dos ocasiones… Antes de liberarlo lo alimentaron mejor y lo obligaron a hacer ejercicio. Cuando finalmente fue soltado, le colocaron pesos colombianos en el bolsillo para que diera la idea de que fue a ese país por su voluntad, y que estuvo con las FARC o en el M19. “Lo dejaron en Ibarra en la casa de su madre y no salió de ahí durante seis meses”, dijo Chiriboga.

Para finalizar esa exposición de los hechos, Galo Chiriboga dijo que el propio gobierno de ese entonces tenía como política de Estado la desaparición de AVC y de Montoneros Patria Libre, dirigentes estudiantiles, gremiales, defensores de DDHH…

Y para sostener la acusación, la Fiscalía se basó en varias legislaciones. Entre ellas la Constitución y el Estatuto de la Corte Penal internacional. Además, la Resolución 95 de la ONU, conocida como Los principios de Nuremberg. Asimismo, La Convención Americana de los Derechos Humanos y una decena de casos, incluso de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que es parte del sistema que actualmente es criticado duramente por el gobierno de Rafael Correa.

En el momento que la defensa de Vaca pudo tomar la palabra dijo que la intervención del Fiscal fue «retórica y sentimental» y le pidió que determine de manera clara y absoluta en qué participa el exgeneral Vaca «cuando apenas hay un referente subjetivo que el ingeniero calvo es el general Vaca». Chiriboga respondió: «Hay una versión de Juan Viteri que dice que Edgar Vaca ordenó la detención de Luis Vaca. También hay documentos desclasificados en los que ingeniero calvo es el señor General Vaca. El contacto del Ejército con la Policía era en ese momento el capitán Vaca. Posteriormente el general Vaca asume la dirección de la UIES, dirección que estuvo vinculada a estas violaciones de derechos humanos».

La Fiscalía atribuyó a Vaca los delitos de arresto ilegal, plagio, atormentar a los presos y violación. Esto pudiera llevar al policía más condecorado de la historia de esa institución a 25 años de reclusión en una cárcel del país. La Justicia cree que está fuera del país, en Colombia o Estados Unidos. La defensa dice que está a buen recaudo…

La Corte Nacional ordenó la prisión preventiva y esto fue aceptado por la Justicia por su presunta participación en los delitos como autor. Pero los casos contra Vaca no terminarán, de eso está seguro su abogado defensor, Marcelo Dueñas.

Y pudiera estar en lo cierto… En los archivos de la Comisión de la Verdad se detalla que se ha desclasificado un oficio del 19 de agosto de 1985 firmado por el expresidente León Febres Cordero donde dice a Vaca y otros altos oficiales encargados de la ofensiva antiterrorista de ese entonces que deben reportar sus actos diariamente y seguir las ordenes de Gustavo Lemus, Carlos Pareja y Jaime Nebot, en ese entonces Gobernador del Guayas y actual Alcalde de Guayaquil… Esta historia de seguro continúa. 28/10/2013. Tomado de Plan V.

Entrevista / Marcelo Dueñas, abogado defensor de Edgar Vaca
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’El General Vaca está a buen recaudo’

EnviarEl abogado defensor de Edgar Vaca cree que su defendido será sentenciado inevitablemente.

¿El exgeneral Vaca es un trofeo?
La idea nuestra es que se está constituyendo en un trofeo efectivamente y, como estamos esgrimiendo en los escritos a la Fiscalía, son perseguidos políticos de manera inequívoca, inocultable. Las circunstancias cambiaron luego de 28 años y ahora son los perseguidos, cuando en su momento sirvieron al Estado y la sociedad, pusieron en orden a la gente que estaba por fuera de la ley.

¿Para usted es un tema político exclusivamente?
Este es un tema político porque cuando se trata de tipificar delito de lesa humanidad lamentablemente ninguno de los requisitos previstos en los propios marcos internacionales se cumple. Alfaro Vive era un grupo subversivo terrorista que estaba al margen de la ley y no se podía considerar que era un grupo social o político que era perseguido de manera sistemática permanente por alguna fuerza represiva del Estado para ser eliminado. Fueron sometidos al imperio de la ley.

¿Susana Cajas, Luis Vaca y Javier Jarrín eran parte de AVC?
Estas tres personas, de manera franca y abierta, se han declarado así. Incluso en la audiencia de formulación de cargos estaban con sus brazaletes, con sus pañuelos, que eran del Alfaro Vive Carajo; esta gente estaba vinculada. La detención de estas tres personas es un caso de un operativo militar, en 1985. No olvidemos que el general Vaca en esa época era el capitán Vaca y era un miembro policial y no olvidemos que no había afinidad entre policías y militares, había cierto celo profesional. Pero resulta que el Fiscal General en la audiencia de la formulación de cargos manifiesta muy claramente que vincula al general Vaca porque un señor Juan Viteri ha manifestado que el -en ese tiempo- capitán Vaca dispuso la detención de las tres personas. Pero eso es insólito, inverosímil, es imposible porque el capitán Vaca siendo un policía no podía tener injerencia ni autoridad ni influencia en el Ministro de Defensa, en el Jefe del Comando Conjunto, el Comandante del Ejército.

¿Cuál es el camino de la defensa cuando posiblemente hubo la orden directa del capitán Vaca de que se agreda a estas personas, o que él haya participado en esos presuntos actos?
El Fiscal no diferencia en lo absoluto y a todos los involucrados, a los 9 militares y al general Vaca, les formula cargos por los mismos delitos: por la detención ilegal, por las torturas y por la violencia sexual, pero no dice quién hizo eso. Se supone que todos participaron en los tres delitos, pero resulta que el general no participa en ninguno de los momentos porque no es militar. No es parte del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, no es parte de la Unidad de Inteligencia de Conocoto. De manera sorpresiva y preocupante se lo vincula en este caso que no es precisamente el caso insignia. Tienen muchísimos casos, donde son los miembros policiales el objeto, el trofeo de venganza de quienes en su momento estuvieron al margen de la ley, y la venganza se refleja en este tipo de actitudes que son persecución política. Utilizando como brazo ejecutor a la Justicia, a la Fiscalía en este caso.

¿Dónde está Edgar Vaca?
El general Vaca está con orden de prisión preventiva porque el general Vaca no fue tan ingenuo de permanecer a expensas de que lo capturen, que lo sometan a una infamia de esta naturaleza. El general Vaca no tiene garantías en lo absoluto. Está a buen recaudo donde no pueda estar en el menor riesgo de ser detenido por el Poder Judicial que existe ahora y por la gente que tiene interés… y aquí están muchos nombre de la gente que tiene interés.

¿Fuera o dentro del país?
Está a buen recaudo. El fiscal ha exhibido un documento de que el general Vaca estaría radicado en Colombia… que él asuma la responsabilidad de ese documento.

¿El exgeneral Vaca posiblemente pudiera estar involucrado en otros juicos?
Sí hay varios casos, este caso no es precisamente el que está orientado en contra del general Vaca y por eso es incomprensible cómo lo involucran. He solicitado una copia certificada de toda la instrucción fiscal para determinar qué prueba, qué elemento de convicción tiene para involucrar al general Vaca.

¿Acudirán a instancias internacionales?
Sí, por persecución política, y eso vicia de nulidad el proceso por falta de imparcialidad, que las supuestas víctimas estén muy cerca en el desarrollo de los procesos, no por calidad de víctimas sino otros ámbitos. Ha habido un direccionamiento cuando se crea la Comisión de la Verdad que investiga exclusivamente dentro del período 84-88. Eso nos causa mucha preocupación: el direccionamiento.

¿Vaca y usted tienen la precepción de que será sentenciado?
Desde luego, no cabe duda.

¿La hoja de vida institucional del exgeneral Vaca no pesa en este proceso? ¿No tiene apoyo en Estados Unidos al ser un oficial que era respetado por sus autoridades?
Quien debiera estar preocupado por la situación del general Vaca es nuestra propia sociedad, es nuestro propio país, ningún otro país. Y el apoyo debiera nacer de la misma sociedad que, gracias al trabajo de la Policía de ese tiempo, el Ecuador ha podido vivir en paz, ha tenido décadas de paz. De lo contrario no estaríamos como Colombia, estaríamos peor que Colomnbia, porque había temeridad en las actuaciones de esta gente.

¿Y la Policía no lo apoya?
Lastimosamente vemos que se mantienen al margen como institución, es muy lamentable. Nadie reclama el espíritu de cuerpo, pero sí un acto de solidaridad y no ha existido eso. Y en todo caso no se ha requerido ni solicitado, en lo absoluto.

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