¿Aliados ambientales o villanos ecológicos? El verdadero rol del pino y el eucalipto en plantaciones forestales sostenibles
En medio de una creciente preocupación por el cambio climático, la conservación de los ecosistemas y el uso responsable de los recursos naturales, el debate en torno al impacto ambiental de especies como el pino y el eucalipto ha cobrado fuerza, pues son consideradas especies aptas para la recuperación de suelos degradados. Según el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), el 70% de las plantaciones forestales en Ecuador se desarrollan sobre terrenos previamente deteriorados por la actividad humana. En estas áreas, una plantación de pino y eucalipto contribuye a aumentar la infiltración de agua, fijar nitrógeno, controlar la erosión y mejorar la estructura del suelo. Además, estas especies favorecen la fijación de carbono en el suelo y la biomasa, actúan como refugio de flora y fauna, y ayudan a cubrir la creciente demanda de productos de madera provenientes de fuentes responsables.
Por su parte el sector forestal es un motor clave para la economía rural en Ecuador. Solo en 2023, esta industria generó aproximadamente 123 mil empleos directos y alrededor de 300 mil entre directos e indirectos, consolidándose como un pilar del desarrollo productivo y social del país. Dentro de este sector, las plantaciones de pino y eucalipto representan más del 85 % de la madera legal producida a nivel nacional; en este contexto, Aglomerados Cotopaxi lidera el modelo de gestión sostenible con más de 19.700 hectáreas de patrimonio forestal gestionadas bajo estrictos estándares de sostenibilidad, avalados por la certificación FSC ®.
Bajo esta premisa cada especie dentro del patrimonio forestal de Aglomerados Cotopaxi ha sido seleccionada tras rigurosos estudios de adaptabilidad, genética y rendimiento; lo que ha permitido avanzar en silvicultura responsable, investigación aplicada y trabajo conjunto con universidades y entidades públicas. Contrario a la percepción común, el pino y el eucalipto no secan las fuentes hídricas, para esto la compañía en alianza con las comunidades usuarias realizan mediciones periódicas de caudal. Así también, se analiza la calidad del agua e indicadores biológicos en conjunto con la academia, quienes han confirmado que las plantaciones mantienen y mejoran la salud de las microcuencas mientras son hogar de una amplia variedad de especies animales y vegetales, convirtiendo a cada zona en un ecosistema que contribuye a la conservación de la biodiversidad local.
Aglomerados Cotopaxi destaca que cada especie forestal es ubicada en zonas con características ecológicas adecuadas, lo que permite su integración al entorno sin desplazar la flora nativa ni alterar el equilibrio ambiental. Roberto Neumann, representante de Aglomerados Cotopaxi, señala: “Las plantaciones forestales, cuando se planifican y manejan con criterios técnicos, evitan impactos negativos y aportan a la generación de biodiversidad, la protección del suelo y el aprovechamiento sostenible de un recurso renovable”.
El establecimiento de plantaciones de pino y eucalipto se desarrolla sobre suelos previamente degradados por agricultura o ganadería, frente a esto, y gracias a su experiencia en manejo forestal responsable, Aglomerados Cotopaxi ha posicionado a las plantaciones forestales como una alternativa para reducir la presión sobre los bosques nativos. Consumir productos derivados de madera de plantaciones certificadas es la única manera de garantizar un consumo responsable con impacto ambiental positivo.
